La tarta Langarola de Foderie Ozanam, perfecta para combinar con el zabaglione, también producido en las mismas fábricas, es un dulce tradicional piamontés, en concreto, como sugiere su nombre, de la zona de Langhe, y se considera el postre tradicional de Cortemilia, una localidad de la provincia de Cuneo. El cultivo de la avellana empezó en la zona de Cuneo hacia finales del siglo XIX, cuando el mildiu, una enfermedad de la vid, afectó a la viticultura de la zona y hubo que buscar alternativas. Este pastel se elaboraba antiguamente para aprovechar el exceso de avellanas al final de la temporada y se preparaba principalmente en otoño e invierno. Fonderie Ozanam es una cooperativa social de Turín que opera desde hace años en el sector de la restauración, acogiendo en sus laboratorios a personas con discapacidad, migrantes, ex presidiarios, jóvenes y ancianos en situación de vulnerabilidad social y mujeres víctimas de violencia, elaborando preparaciones alimentarias de calidad respetando el medio ambiente urbano y aplicando dinámicas de economía circular y de lucha contra el despilfarro. La tarta Langarola la podéis encontrar en formato de 300g.